MÉRIDA, MX.-¡No queremos romantizar el trabajo sexual”, advierte Dafne, mejor conocida en el activismo como Muñeca Aguilar.
Se trata de la obra ¡Las Nuevas Aventureras!, la cual han calificado como una obra de comedia y política.
“Todas las que estamos aquí somos trabajadoras sexuales y el hecho de serlo no implica que nos dediquemos exclusivamente a eso porque también ha sido difícil, buscamos que no se siga romantizando el trabajo sexual”, comentó.
Desde sus propias voces, confirman que el trabajo sexual es violento y es por eso que este grupo de mujeres que dan vida a ‘Las Nuevas Aventureras’ han buscado otras vías para obtener recursos económicos, es así que ampliaron sus actividades hasta llegar a la creación de esta obra de teatro cien por ciento autogestiva y con la cual también buscan tener justicia cultural.
Aunque la obra se ha presentado de manera independiente en diversos momentos, sí buscan dar a conocer su trabajo para que en la medida de lo posible, puedan tener una mejor producción.
“Comenzamos con un vestuario reciclado, varias prendas fueron sacadas de la basura y hasta ahora hemos hecho la obra como hemos podido, con nuestros propios recursos”, relató Muñeca.
Aunque encontrar espacios para presentarse no ha sido una tarea fácil, no han dejado de tocar puertas, así que recientemente se presentaron en Quinta Casa Belén, en Mérida.
En este lugar, además de presentar su proceso creativo, invitaron a otras personas a sumarse a un bazar para generar un espacio en donde haya un beneficio parejo.
“El espacio también lo abrimos para emprendedores, así que se armó la Bazarita LGBT porque desde el Ayuntamiento de Mérida nos han negado el espacio”, reportó.
En un espectáculo que incluyó una especie de pasadía, ‘Las Nuevas Aventureras se presentaron’, pero las personas asistentes además de conocer su trabajo, tuvieron acceso a una piscina, comida, bebida y tenían a la mano un bazar que busca ser un espacio seguro para las disidencias.
Muñeca compartió que la obra que promueven nació como un proyecto con un toque de cabaret, pero a esto se sumó la idea de un performance político, ya que aborda temáticas que les duelen dentro del trabajo sexual como los transfeminicidios, feminicidios, la exclusión laboral, trata y tráfico de personas, explotación sexual y psicológica y todas las violencias de las que han sido víctimas.
“Son nuestras propias vivencias, son las violencias que hemos vivido. Algunas de nosotras han sido ‘mulas’ porque han tenido que vender o llevar droga de un lugar a otro”, añadió.
Con la guía del libro llamado ‘Las reinas del trópico’, tuvieron la inspiración para desarrollar este proceso.
“Fue una inspiración. El trabajo sexual no es únicamente lo que vemos en las calles. Con este proyecto, hay una compañera que nos dijo: gracias a esto dejé las drogas. Y a la vez es también un poco de justicia cultural porque las personas como nosotras no siempre tienen acceso a eventos culturales”, mencionó.
Las actrices de esta obra ya no quieren sólo ser ‘sujetas de investigación’, es decir, ser trabajadoras sexuales abordadas desde procesos de indagación en donde sólo se les tacha como delincuentes, drogadictas, personas mañosas y con otros defectos en medio de la sociedad.
Al contrario, quieren dejar en claro que muchas de las personas dedicadas al trabajo sexual fueron orilladas a tal actividad por la misma dinámica social y la falta de oportunidades, sin que precisamente sea un ‘hobby’ o pasatiempo.
“Queremos mostrar la otra cara de lo que no saben. Más que vernos como víctimas queremos compartir anécdotas, vivencias y también cosas raras que nos pasan”, señaló Muñeca.