En Yucatán tenemos muchas tradiciones, pero una de las menos chidas son todas las especies de serpientes que habitan en el estado y que disfrutan meterse a tu casa sin ser bienvenidas.
Aunque la mayoría de ellas son inofensivas (sólo te sacan un buen susto), existen otras que son potencialmente venenosas.
En época de mucho calor, son comunes los reportes de serpientes encontradas en casas, ya que éstas buscan un lugar fresco donde estar (y no las juzgamos).
Serpientes NO VENENOSAS
Entre las especies que podemos considerar inofensivas están: Boa centronamericana (Och kaan), Serpiente ciempiés yucateca (Tantillita canula), Ratonera Oliva (Senticolis triaspis), Culebra roja del cafetal (Kuyun kaan), Culebrilla ciega afroasiática (Coniophanes meridanus) y Serpiente ciega yucateca (Amerotyphlops microstomus).
Serpientes LIGERAMENTE VENENOSAS
Existen otras que, aunque son peligrosas, su veneno no resulta potencialmente letal: Bejuquilla verde (Chaay kaan), Serpiente perico mexicana (K’ok’okaan), Culebra alacranera (Sikil kaan), Culebra guardacaminos (Xulub kaan) y Culebra sin rayas peninsular (Coniophanes meridanus).
Serpientes VENENOSAS
Finalmente, existen tres especies que son altamente venosas y debemos extremar precauciones si nos topamos con ellas: Coralillo variable (Micrurus apiatus), Wol poch’ (Agkristrdon biliniatus) y Cascabel yucateca (Crotalus tzabcan).
¿Qué hacer si encuentro una en mi casa?
Lo primero es mantener la calma, no trates de matarlas, llama a los bomberos, policía Estatal o Municipal; a la asociación Proyecto Santa María o la Semarnat para su debido trato.
En caso de ser mordido por una de ellas, trata de identificar su especie, acude a un centro de salud y no te automediques.