Por Syval
El Informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022, publicado el pasado 8 de septiembre, destaca las consecuencias de los últimos eventos a nivel mundial, así como el grado de incertidumbre al que se enfrenta la sociedad y los retos para construir territorios resilientes frente a nuevos riesgos y transformaciones.
Los últimos años se han caracterizado por la ocurrencia de eventos que han afectado a todos los países, desde crisis económicas, crisis climática y una pandemia ocasionada por la COVID-19, hasta diversos conflictos bélicos, incluyendo la guerra en Ucrania. Estos eventos han generado, entre muchas otras consecuencias, un descenso en el Índice de Desarrollo Humano (IDH). Según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), por primera vez en la historia, el valor del IDH mundial disminuyó y tuvo un retroceso de aproximadamente 5 años; más del 90% de los países sufrió una disminución del índice en 2020 o 2021.
Fuente: PNUD. Informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022.
Adicionalmente, el PNUD menciona que existen tres grandes importantes retos para los países: las presiones planetarias y las desigualdades, la búsqueda de transformaciones sociales justas para aliviar esas presiones y la polarización generalizada e intensificada de la sociedad, la cual genera un retroceso para la acción necesaria en los cambios.
Asimismo, el Informe plasma la importancia en la salud mental de la población, la cual tiene implicaciones en la forma que las personas actúan, perciben, piensan y se relacionan con su entorno. En ausencia de herramientas que les permitan ser resilientes ante eventos futuros, la población está propensa a un bajo rendimiento educativo, a una baja productividad en el trabajo, a la pobreza, a una mortalidad prematura y a una mala salud en general.
Para entender el vínculo entre el bienestar mental y el desarrollo humano, hay que hacer referencia al enfoque de las capacidades, introducido por Amartya Sen. Este autor, replantea el concepto de bienestar y desarrollo humano más allá del enfoque económico, el cual reduce estos dos a una visión monetaria y materialista. Para Sen, la capacidad es definida como la libertad de elección de una persona para determinar la vida que desea. Al no tener claridad de elección, derivado de las consecuencias de problemas de salud mental, las personas están menos dispuestas a elegir asertivamente.
Finalmente, el informe ofrece un último capítulo que hace hincapié en cómo los países, a través de políticas públicas pueden generar vías para la transformación ante nuevos retos. El PNUD plantea 3 grandes categorías, la inversión, los seguros y la innovación, las cuales fortalecerán y promoverán el desarrollo humano de la población y permitirán enfrentar la incertidumbre que se vive actualmente a nivel mundial. Asimismo, se menciona el rol clave de la cultura como oportunidad para generar nuevas perspectivas y acciones colectivas y reconstruir el tejido social.
Fuente: PNUD. Informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022.
Referencia: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022. Disponible en: https://hdr.undp.org/content/human-development-report-2021-22
